miércoles, 31 de marzo de 2010

UN AMIGUITO CANINO

Hoy, de vuelta para casa después de una excursión familiar al super simply, nos ha sorprendido ver aparecer en un visto y no visto una cabecita blanca y peluda con unos ojazos negros brillantes por la puerta de un jardín.
Era un perrito que estaba dando saltos para asomarse y después ponía el morrito en un espacio que quedaba entre la puerta y el suelo, como para que lo siguiéramos viendo.
Nos hemos acercado y se ha venido corriendo a ese lado de la valla de su casa desde el que podíamos verlo.
Mirad qué bonito y qué cara de buenazo.

Hemos estado un ratito con él, acariciándole y diciéndole cosillas.
Era muy mimoso y muy simpático.
Me ha dado un poco de pena tener que dejarlo.

Porque además, cuando le hemos dejado, ha vuelto a irse raudo y disparado hacia la puerta y ha pegado otro de esos saltos gigantes para que le viéramos y nos ladraba, como diciendo '¡¡pero volved!!'.
A mí me gustaría mucho tener un perro y siempre digo que le pondría Rocky. Pues bueno: ahora ya tengo un perrito amigo al que llamar Rocky.
A ver si la próxima vez que pasemos vuelvo a verle y jugamos otro ratito.

¡¡Hasta otro día, Rocky!!! ;-)


p.s. Y pensándolo bien...miradlo... ¿no os recuerda un poco a Nevado? ;-D

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